Desde el momento en que el Centro para el Niño en Desarrollo de Harvard publicó los 5 pasos de servir y devolver, ¡sabíamos que teníamos que compartirlos! Todos los videos instructivos de BabySparks incorporan interacciones de servir y devolver; las cuales son esenciales para construir las bases de todas las áreas del desarrollo de un niño. Y créenos, ¡cuando decimos “todas las áreas” no es una exageración! Los 5 pasos de servir y devolver no solo ayudan al bebé a desarrollar habilidades cognitivas, sociales o físicas. Estas interacciones ayudan al desarrollo moral, a la confianza en uno mismo y hasta pueden provocar la motivación para aprender. Debido a la magnitud de este notable sistema de interacción, consideramos que es imperativo ahondar en más detalles.
Acá tenemos una guía paso a paso:
La definición de servir y devolver
El Centro para el Niño en Desarrollo de Harvard define servir y devolver como una serie de interacciones que le dan forma a “la arquitectura del cerebro”. Cuando un bebé o niño pequeño se dirige a un adulto y “sirve” una señal para interactuar (balbucear, llorar, señalar, hablar) y esa señal es recibida y devuelta por el adulto, las conexiones neurológicas se forman y se fortalecen.
Los 5 pasos de servir y retornar
1 – Cuando identificas una servida, comparte el foco de atención de tu niño. La importancia de este paso consiste en ser consciente de la servida ( una expresión facial, un gorgojeo, que señale en una dirección particular o una palabra.) Una vez hayas notado la servida, involúcrate con lo que sea que esté mirando o señalando. Es como si estuvieras metiéndote dentro de su campo visual para compartir el estímulo.
Ejemplo: Cuando estas frente al lavaplatos, das un vistazo y notas que tu niño esta señalando un pájaro que acaba de pararse en el borde de la ventana. Participa en la acción con él, has contacto visual con él, señala el pájaro y comparte la experiencia.
Objetivo: Participar con él en la servida fomenta estas acciones. Al unirte a él y compartir en lo que se está enfocando, también están fortaleciendo el vínculo.
2 – Devuelve la servida mostrando apoyo y emoción por su acción. En este paso, querrás expresar reconocimiento frente a su descubrimiento y demostrar que también te emociona.
Ejemplo: ¡Sonríe, asiente con la cabeza y muéstrale que estas de acuerdo! “Yo también veo el pájaro. ¡Está muy lindo!” Quizá acércalo a la ventana para que lo pueda ver mejor.
Objetivo: Cuando vea algo estimulante y lo señale, si nadie responde, se puede crear una sensación de ansiedad en él. Devolver la servida lo hace sentir reconocido, reconfortado y comprendido.
3 – ¡Nómbralo! Querrás asegúrate de que su servida sea devuelta con un propósito. Cuando señale algo y exprese curiosidad, emoción o interés, dale un nombre.
Ejemplo: Cuando lo acercas a la ventana para que vea el pájaro, repite la palabra “pájaro”. Dale más detalles como “pequeño pájaro amarillo” o motívalo a que interactúe, “vamos a saludar al pajarito.”
Objetivo: Nombrar el objeto y repetirlo no solo ayuda a que aprenda la palabra sino que también le muestra que a ti también te interesa y que te importa lo que está sucediendo en su mundo.
4 – Espera una respuesta y mantén la interacción. La palabra clave en este paso es “espera”. A veces devolvemos la servida y erróneamente interpretamos el silencio como una señal de falta de interés o de indiferencia. Recuerda que el niño necesita tiempo para procesar lo que está viendo, oyendo o sintiendo. Una vez recibas una respuesta, toma turnos con tus palabras y expresiones y mantén la interacción.
Ejemplo: Al preguntar “¿quieres saludar al pajarito?” hará una pausa. Dale tiempo para que lo procese. Cualquiera que sea su respuesta, un saludo con la mano, otro dedo señalando o quizá una aplaudida de manos, devuelve esta servida y sigan turnándose. ¡Solo recuerda darle tiempo para que lo procese!
Objetivo: La espera le ayudará a sentirse más cómodo y sentir más confianza para desarrollar sus propias ideas. También le ayudará a entender el auto-control y la forma como funciona la comunicación.
5 – Practica comenzar y finalizar una acción. Con frecuencia, es bastante obvio que el bebé o niño pequeño está listo para pasar a otra cosa. Puede que sus ojos se enfoquen en otra cosa o que muestre incomodidad cuando haya finalizado una actividad. El punto de este paso es permitirle tomar el liderazgo cuando finalice cierta actividad y comience una nueva.
Ejemplo: Estando frente a la venta, el niño empieza a retorcerse y a enfocarse en otra cosa en la habitación. Puede decir algo como “adiós pajarito” o “¡eso es todo!” para indicar que entiendes que está listo para dejar de mirar al pájaro.
Objetivo: Permitir que obtenga algo de control sobre el comienzo y final de una actividad puede ayudar a fomentar estas interacciones de servir y devolver. ¡También muestra tu apoyo frente a su exploración del mundo!
¡Recuerda que no necesitas dedicarte a servir y devolver todo el día! Busca oportunidades para hacerlo que se den con naturalidad, como durante el baño (cuando necesitas estar completamente enfocado en tu niño por razones de seguridad) o cuando estas haciendo actividades de BabySparks.